El Control Horario ha dejado de ser visto como una herramienta opresora que utilizaban los jefes con sus empleados para pasar a abastecer a los mismos de una serie de beneficios para mejorar su vida laboral, tales como: flexibilidad horaria, conciliación y sobre todo, el aumento de la productividad en el día a día de sus trabajos.
El trabajo del futuro no entiende de horarios
Todo apunta a que el trabajo del futuro será sin horarios. Y es que, es momento de decir adiós al horario de trabajo y empezar a medir los objetivos.