Hace unos días dábamos la bienvenida a agosto y ahora nos despedimos de él. El temido 1 de septiembre ha llegado. Vuelta a la realidad. Atrás quedan los días de desconexión y diversión, días en los que hemos recargado las pilas, nos hemos llenado de energía y liberado del estrés.
Todo lo bueno se termina vuelve la rutina de los madrugones, jornadas laborales interminables, reuniones…. La vuelta al trabajo se te hace cuesta arriba y en la oficina aflora un sentimiento de depresión postvacacional.
El síndrome postvacacional se refiere la la ansiedad o presión emocional que sufren las personas cuando se reincorporan a sus tareas laborales después de las vacaciones.
Este no se considera una enfermedad sino un proceso de adaptación a la vida laboral carecterizado por la apatía, el cansancio, la falta de energía y de concentración. A continuación vamos a ofreceros algunas de las claves para superar la depresión postvacacional.
10 consejos para combatir la depresión postvacacional
1. Levántate pronto unos días antes
Intenta preparar a tu cuerpo para la rutina. La cama es un espacio de reflexión para muchos y en ocasiones un momento para organizar nuestra agenda. Si sabemos que el día siguiente tenemos algo importante que nos atormenta nos va a costar conciliar el sueño, y entraremos en un bucle de cansancio. Por ello, es importante que unos días antes empecemos a acostarnos más temprano. De esta manera a nuestro cuerpo le resultará más fácil la vuelta a la rutina si se adapta con anterioridad a los horarios que vamos a seguir en nuestra vuelta a la normalidad.
2. Prepárate unos días antes
Establece horarios para tus rutinas. Al igual que la anterior, te va a beneficiar en la medida de acostumbrar a tu cuerpo. Es importante adaptarse de forma paulatina a las cosas, porque si forzamos a nuestro cuerpo este va a acabar resintiéndose.
3. Divide las vacaciones
Las personas que tienen periodos vacacionales largos son más propensas a sufrir síndrome postvacacional. Por ello una buena medida es dosificar las vacaciones. Si sabemos cuántos días de vacaciones nos pertenecen podemos dosificarlos. Para ello existen herramientas como el softaware de gestión de vacaciones de Sesame, que te ayuda a calcular los días que te corresponden y a repartirlos durante todo el año. Así la vuelta no es tan dura ni el resto del año nos parece tan largo.
4. Busca lo positivo de las cosas
Nuestra actitud ante la situación también es muy importante. Hemos de mantener una actitud positiva frente la vuelta al trabajo. Si interpretamos el fin de las vacaciones como algo bueno, puesto que lo es, seguramente no padeceremos el síndrome postvacacional. Si entramos en modo negativo todo nos va a parecer mal o perjudicial. Trabajar haciendo lo que nos gusta no se ha de considerar un castigo, sino que nos hemos de sentir afortunados y felices de poder hacerlo.
5. Prepara a tu cuerpo
Relacionado con lo que hemos comentado anteriormente, los primeros días de adaptación es bueno levantarnos incluso un poco antes de lo previsto. Debes ocupar este tiempo extra haciendo alguna actividad que te despeje o que te apetezca. Por ejemplo, puedes tomarte el desayuno mientras miras tus redes sociales o lees la prensa. Así tendrás más tiempo para ir al trabajo y lo harás sin prisas ni estrés.
6. Dosifícate el trabajo
Dosificar el trabajo es una forma muy útil de reducir el estrés. Márcate unas tareas imprescindibles, es decir organiza y gestiona tu tiempo. Eso si, fija metas diarias realistas y asequibles puesto que si no las consigues, el efecto será el contrario y tu estrés aumentará.
7. Busca actividades antiestrés
Ocupar el resto del tiempo haciendo lo que nos gusta es muy importante. Dedicar tiempo al deporte y a llevar una buena alimentación va a influir en nuestro estado de ánimo, nuestra motivación y nuestro día a día. No hay que descuidarnos y olvidar todo lo que nos gusta y nos hace sentir bien solo porque hayamos vuelto a la rutina.
Estos son algunos de los consejos que te harán la vuelta a la rutina más llevadera. Evitar el efecto postvacaciones es posible, por ello, tómate la vuelta al trabajo con filosofía y disfruta de lo que haces.