Si ayer os contábamos cuáles son las medidas clave para conciliar, hoy queremos hacernos eco de los daños colaterales de no poder conciliar la vida laboral y familiar.

Consecuencias de no conciliar

El servicio de guardería, la jornada intensiva durante todo el año o el teletrabajo, son las medidas que más cuesta que las empresas implementen en pro de facilitar la conciliación laboral.

Pero antes de conciliar, tenemos que aprender a desconectar. En Francia ya se ha regularizado la desconexión digital, prohibiendo los correos electrónicos, las llamadas y todo tipo de contacto después del horario de trabajo.

¿Cómo afecta la falta de conciliación laboral a la vida de los empleados?

Las largas jornadas de trabajo unidas a la carga familiar, afectan gravemente a la salud de los empleados. A continuación os enumeramos algunas de las consecuencias más directas de no conciliar:

  • Se reduce el rendimiento de los empleados, ya que no estarán motivados y la satisfacción con la empresa será muy baja e incluso nula.
  • En el caso de empleados con hijos, llegar a casa agotados, hará que tengan menos paciencia con ellos y puedan dedicar menos tiempo a ellos.
  • Los empleados acaban sufriendo el síndrome Burnout, es decir, alcanzan tal nivel de agotamiento físico y mental que pierden el interés total en las tareas y responsabilidades.
  • Las vacantes son muy difíciles de cubrir, ya que los empleados valoran más poder flexibilizar la jornada y conciliar, que recibir salarios elevados.

Es importante recordar que los programas de conciliación laboral, la flexibilidad horaria y la formación durante la jornada laboral, no solo benefician a los empleados, también son beneficiosos para las empresas.

Y tú, ¿vas a facilitar la conciliación laboral en tu empresa? Descubre algunas herramientas que favorecen la conciliación laboral  y disfruta desde hoy mismo de las ventajas derivadas.

¡Cuéntanos qué medidas adoptarás y qué resultados obtienes!