Jose Luis Casero, presidente de la Comisión para la Racionalización de Horarios (ARHOE) hacía alta montaña con su mujer. Ha recorrido medio mundo hasta hace pocos años que tuvo a sus hijas y entonces empezó a darse cuenta de lo que era realmente conciliar.

Él es empresario pero también ha trabajado por cuenta ajena y en la administración pública y, por tanto, puede hablar desde diversas perspectivas y en su nuevo cargo tiene un objetivo muy claro: “Demostrar a los empresarios que utilizar técnicas de gestión empresarial adecuadas, entre ellas, la racionalización y optimización del tiempo, no solamente va a provocar que su empresa gane dinero, sino que además consigue un clima laboral bueno y trabajadores más óptimos, más creativos y más innovadores”.

Técnicas de gestión empresarial como la racionalización y optimización del tiempo, aumenta la rentabilidad y, además, consigue un buen clima laboral con trabajadores más óptimos e innovadores.

¿Pero cómo se convence de eso al empresario? ¿Cómo conseguir que esa filosofía llegue a todo el tejido empresarial y se aplique?  “Poniendo ejemplos, explicándolo desde la perspectiva del empresario. Nosotros, desde la comisión, debemos mostrar aquellas empresas que ya aplican estos conceptos y demostrar que funcionan de maravilla” Por eso llevan publicadas dos ediciones de un libro que se llama ´Por la productividad y racionalización de horarios en las empresas. 8 casos de éxito‘ que recoge, a modo de guía, una serie de modelos empresariales que están implantando medidas relacionadas con la flexibilidad horaria, teletrabajo, conciliación o reducción de jornadas.

Pero, cuidado, también existen una labor de concienciación, muy importante, de los empleados. “Ya sabemos que la empresa es del titular pero, los trabajadores, no pueden usar un sistema de bajas laborales o de seguridad social pidiendo una baja cuando les duele un poco la muela. Evidentemente hay bajas justificadas, pero hay otras que no. Por eso necesitamos que los trabajadores nos ayuden. Uno no puede estar pensando en escaquearse. Vamos todos en el mismo barco”. Para Julio Casero, es imprescindible que los trabajadores sientan esa corresponsabilidad.

Hay jefes que no son capaces de sacar competencias válidas de sus trabajadores en un horario mejor. No saben extraer la productividad de sus empleados por una mala organización.

A veces, la solución es más sencilla de lo que pensamos. Según Casero, en muchos casos, empresas que no tendrían porque hacerlo, aplican horarios complicados simplemente por incompetencia. “Incompetencia de los jefes que no son capaces de sacar competencias válidas de sus trabajadores en un horario mejor. No saben extraer la productividad de sus empleados por una mala organización

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Son las 19.30. Vienen sus niñas y su mujer. Es muy difícil conciliar cuando uno es empresario y además preside la comisión para la racionalización de horarios. Es paradójico, pero es así. Jose Luis Casero quiere cundir con el ejemplo, no le esta siendo fácil, y más ahora que todos los medios quieren entrevistarle. Pero aquí es donde intenta aplicar una de las frases que más llama la atención de toda la entrevista: “El principio de igualdad es el tratamiento desigual de situaciones de hechos desiguales. Horarios racionales no es que todo el mundo cierre a las 18.00. Es que yo entienda que un periodista, cuando puede hacer la entrevista es a esta hora, porque su trabajo es así. Lo importante es que luego él dentro de su empresa, tenga la libertad de acabar antes otro día que ya tenga su trabajo acabado” Y aquí aparece otra de las reflexiones más interesantes de Jose Luis Casero, el mortal: ‘¿Ya te vas?’

‘¿Ya te vas?’ Es la típica frase que desestabiliza y que lleva al calentamiento de silla tan habitual en España.

“¿Ya te vas? ¿A quien no le ha dicho eso su jefe alguna vez? Cuánto daño ha hecho esa frase. ¡Es mortal! Es la típica frase que desestabiliza y que lleva al calentamiento de silla tan habitual en España. La confianza es fundamental, hacia un lado y hacia el otro. Si el trabajador funciona por objetivos, el empresario debe confiar en que si acaba a una hora determinada es porque se ha organizado así y ya esta. Si luego los objetivos no están cumplidos, es cuando se deben tomar las medidas necesarias, pero no antes. La gente necesita una orientación, pero no estar fiscalizada constantemente. La pregunta debería ser, ‘¿No te vas ya?’, porque eso indica que no has podido hacer tu trabajo en el tiempo que se te ha asignado”.

Se nos agota el tiempo, hay que conciliar. ¿Un mensaje final de peso? “Empresario no espere a que los políticos resuelvan sus problemas. Ud, al margen de normas, puede gestionar su empresa y sus recursos para conseguir un negocio más productivo, competitivo y libre

Majo Castillo