Internet  y, en general, el fenómeno de la globalización, ha hecho posible un aumento comunicativo entre los distintos países del mundo, otorgándoles numerosas ventajas pero también dando lugar, en algunos sectores,  a un gran rechazo.  En este sentido, podríamos decir que este proceso global ha perjudicado  a individuos, instituciones y empresas, aumentando exponencialmente la competencia entre estos agentes.

Por ello, aquellas técnicas que sirvan para idear soluciones a determinados problemas o mejorar las existentes, son un gran reclamo entre los factores que intervienen, sobre todo, en la economía. En este caso, hablaremos del arte del brainstorming para la obtención de múltiples ideas con el fin de resolver los inconvenientes que se puedan presentar en determinadas ocasiones.

¿Qué es el brainstorming?

La lluvia de ideas, conocida mundialmente como brainstorming, y originaria del ámbito empresarial,  es uno de los métodos creativos más antiguos y populares.  

Pero, ¿cómo funciona el brainstorming?

Esta técnica grupal consiste en la generación, de forma interactiva, de ideas originales. Lo especial de esta sesión es que se elimina cualquier juicio o crítica sobre las opiniones de cada individuo,  para que ningún miembro del grupo se sienta amenazado o bajo presión.

El funcionamiento de esta tormenta de ideas se basa en el asociacionismo. Es decir, las ideas dan lugar a asociaciones, por lo que el círculo de intervenciones es continuo, pues cada opinión es interpretada de manera diferente por cada componente de la sesión.  Se pone en juego la imaginación y la memoria de una manera encadenada, dando lugar a una serie de ideas que, más adelante, serán analizadas y evaluadas.

¿Qué influye en las sesiones de brainstorming?

El ambiente o lugar en el que esta sesión se ha de llevar a cabo ha de ser cómodo y espacioso, propiciando la participación de todos los individuos. Pero, aunque el entorno sea clave, otro factor importante en la consecución de una reunión eficiente de ideas, es evitar todo aquello que paralice la creatividad en la sala. Es aquí donde entra en cuestión el tema de la confianza, el ánimo, la motivación, la autosuperación, las ganas de encontrar soluciones…  Se puede condicionar el sitio, pero, al fin y al cabo,  el estado anímico es algo esencial.

La herramienta fue ideada en el primer tercio del siglo XX y, en principio, parecía ser un éxito. Y, os preguntaréis, ¿es eficaz el brainstorming en la actualidad? Hoy en día, numerosos estudios demuestran que individualmente se generan más ideas que de forma colectiva. Esto ocurre porque nuestro cerebro no está preparado para trabajar en grupo, ya que la aportación de cada persona eclipsa o frena la elaboración de propósitos, de intentos de ideas, del resto.

Después de haber visto los beneficios e inconvenientes  de esta forma de trabajar, podemos intentar ponerla en práctica para medir su eficacia por nosotros mismos. Muchos empresarios siguen haciendo uso de esta técnica, y no tienen inconveniente de seguir utilizándola. ¿Eres tú uno de ellos?

 

control-jornada-sesame-time