La jornada laboral flexible ha sido y será uno de los objetivos del trabajador para alcanzar la conciliación laboral y familiar. Pero además, se ha demostrado que la flexibilidad laboral aumenta la creatividad de los trabajadores.

Si bien, la decoración de las oficinas, como la incorporación de plantas, la disposición de luz natural, o bien el empleo de colores claros en las paredes y mobiliario son algunos de los aspectos clave que hacen de nuestra oficina un espacio perfecto para trabajar y con capacidad de estimular nuestro cerebro.

Ahora bien, ¿y si además dispusiéramos de uno horario flexible para desarrollar nuestras tareas? Pues aunque no lo parezca, además de los elementos materiales que nos rodean, el intangible de la flexibilidad contribuye también a nuestro confort y estimulación, de hecho incide positivamente sobre nuestra creatividad laboral multiplicándola de forma exponencial.

Gracias a la incorporación de las tecnologías al entorno laboral ya no es preciso acudir cada día a la oficina, y lo que es mejor, no es necesario permanecer 8 ó 9 horas fomentando el presentismo laboral. Esa forma de trabajo está llegando a su fin debido a la creciente autonomía de los trabajadores, que desde hace unos años se está imponiendo en las organizaciones. Gracias a ella los empleados eligen sus propias fórmulas de trabajo, el espacio donde desarrollar sus tareas y el horario en el que realizarlas, creando así su propio estilo de trabajo. De este modo los empleados son más creativos, eficaces y por ende, productivos.

Pero, ¿cómo llegamos a ese punto de creatividad? Pues sorteando las siguientes barreras:

3 Barreras de la creatividad

  1. El estrés producido por un mal camino al trabajo.

Para salvaguardar nuestra creatividad es interesante evitar, en la medida de lo posible, los atascos matutinos, que potencian nuestro nerviosismo y merman nuestra chispa creativa del día. Además, si podemos evitar el desplazamiento y aprovechar las nuevas tecnologías para teletrabajar desde casa, mucho mejor.

  1. No tener nuestro propio control.

Cuando estamos sometidos a jerárquicas órdenes, el estímulo creativo desciende hasta llegar a una completa desmotivación. Así lo demuestra un estudio realizado por Harvard Business Review donde se afirma que el compromiso del trabajador y la satisfacción de este están estrechamente relacionados con el autocontrol que uno mismo tiene de su propio entorno. En este caso sería la capacidad de elegir dónde y cuándo desarrollar su trabajo, o sea tener flexibilidad.

  1. Impositivos horarios de trabajo.

El cerebro humano presenta ritmos creativos variables. Esto quiere decir que en función del día y de las circunstancias que nos rodean unas veces seremos más creativos y otras menos. Por ello, disponer de flexibilidad laboral resulta esencial si deseamos tener empleados creativos.

La app que impulsa la creatividad

Los horarios de trabajo flexibles se consiguen gracias al empleo de la tecnología, que considere al trabajador la pieza fundamental de la organización. Por ello, la herramienta de gestión horaria Sesame Time se vuelca con los empleados para que estos autogestionen su tiempo y se autoresponsabilicen de sus tareas. De este modo logramos tener los equipos de trabajo más creativos del mercado, porque sus integrantes gozan de una amplia flexibilidad que les permite estar motivados cada día en el cumplimiento de sus obligaciones.

 

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