Por lo general los procesos de selección suelen ser a través de entrevistas presenciales, en las que entrevistador y entrevistado están en contacto pero… ¿y si el proceso es a ciegas?, ¿y si no se conoce nada del candidato?
Como norma básica todos los aspirantes a un puesto de trabajo tendrían que ser válidos, pero es cierto que la primera impresión (vestuario, imagen, peinado…) hace que se cree una opinión a priori de los mismos. ¡Es inevitable, somos humanos!
El reclutamiento a ciegas, también conocido como blind audition, es un proceso de selección previo a la primera entrevista personal, en la que el candidato puede mostrar todo su potencial y talento sin que el entrevistador haya tenido acceso a la información de su Currículum Vitae.
La selección a ciegas comienza con el lanzamiento de una oferta de empleo a la cual los candidatos interesados se inscriben. A la hora de inscripción utilizarán generalmente seudónimos o números de identificación para no revelar la identidad.
Se realizan distintas pruebas y tests. Las pruebas más comunes son redacción de artículos o poner solución a distintas situaciones cotidianas de la empresa.
El técnico de Recursos Humanos obtiene datos y puntuaciones de cada una de las pruebas, los cuales serán necesarios para elegir a los candidatos.
Una vez seleccionados los perfiles mejor valorados tendrá la primera entrevista personal en la que se desvelarán todos los detalles del Currículum Vitae.
En ningún momento de este proceso el reclutador debe tener acceso a la información de los candidatos, ni siquiera al nombre. Sólo podrá acceder a los resultados de las pruebas realizadas que le permitirán decantarse por un candidato u otro.
¿Qué beneficios tienen los procesos de selección a ciegas?
- El primero y más importante es la desaparición de los prejuicios. Como hemos comentado previamente los reclutadores no tienen ningún contacto con los candidatos, ni siquiera acceden a su CV.
- Además se realizan pruebas con las que realmente se demuestran sus habilidades y conocimientos, esto nos permitirá conocer si realmente sirven o no para el puesto de trabajo a cubrir. ¡Conoceremos el talento de las personas!
- Los centros de formación son muchas veces la clave a la hora de la selección del personal. Las universidades y escuelas de renombre forman a mejores profesionales, ¿pero es así realmente? No tiene por qué, así que no te dejes guiar solamente por el centro de estudios.
El proceso de selección a ciegas no es sencillo debido a la cantidad de dedicación que supone adaptar un conjunto de pruebas competenciales y aptitudinales a cada vacante que surja. El proceso es costoso, tanto en tiempo como en dinero, pero los resultados que se extraen son muy interesantes.
