Nos encontramos actualmente en una época de cambio en la que existe un deseo común por encontrar un trabajo que concilie en la medida de lo posible con la vida personal y familiar. Para ello, hay una serie de alternativas de empleo mediante las cuales es más sencillo gestionar nuestros propios horarios sin tener la vida completamente ligada al trabajo.
Existen diversos tipos de trabajo flexible:
- Flexibilidad horaria. Dependiendo de las necesidades, cada empleado se puede auto gestionar sus horas de trabajo dentro de unas pautas establecidas, cumpliendo, eso sí, con las horas que tiene asignadas y llegando a los objetivos marcados.
- Medio tiempo. Dos trabajadores se encargan de cumplir las tareas como si fueran uno solo que trabaja a tiempo completo. Cada uno de ellos trabaja media jornada.
- Alternancia de días. Existen diferentes alternativas a este modo. Hay empresas que trabajan 10 días seguidos para después acumular más días de descanso, en semanas alternas…
- Por proyectos. Se realiza un proyecto y la empresa paga en base a la duración de la realización del mismo.
- Plan mixto. Las nuevas tecnologías permiten realizar parte del trabajo sin necesidad de encontrarse en la empresa.
Para cualquiera de esos casos se deben tener en cuenta algunas claves:
- Tener clara la definición de objetivos y las responsabilidades de cada puesto de trabajo y cada cargo.
- Canales mediante los cuales se establecerá la comunicación entre empleados o con superiores. Al no tratarse de un empleo con continuidad en un mismo puesto y las mismas horas, pueden darse circunstancias en las que los empleados no tengan relación personal, y habrá temas que deberán tratarse, así como plataformas para transferir información y documentos, editar en tiempo real…
- Realización de juntas y reuniones periódicas en los que todos se encuentren presentes.
Para ello, existen diferentes modos de realizar contratos:
- Fijo-variable: la empresa ofrece diferentes horarios al trabajador, éste elige y ese se convierte en su horario obligatorio.
- Horario flotante: existe un margen dentro del cual el empleado elige cuando entrar a trabajar.
- Libre: autogestión del tiempo, se basa en cumplir objetivos.