El SteelHouse, empresa de marketing y publicidad, se han implementado fines de semana de tres días una vez al mes. El CEO de la empresa, Mark Douglas, anunció la medida en enero de 2017 con el objetivo de aumentar la productividad de la empresa.

Los meses sin fines de semana largos se incluye algún viernes o lunes libre. En ese día, toda la compañía deja de funcionar. Esto distingue el día extra de otros festivos, en los que algún equipo en la empresa sigue trabajando. Además, Douglas indica que el SteelHouse day, como se le llama a este día, ha aumentado la energía y productividad.

A pesar de que se elimina un día de trabajo cada mes, que representa en total unas 10.000 horas en la empresa, esta medida ha mejorado el trabajo en equipo. Además, los trabajadores se han sentido mejor.

Esta medida se suma a otra igual de innovadora. Y es que los trabajadores de SteelHouse cuentan con un bono anual de 2.000 dólares. Estos van destinados a que el trabajador tome las vacaciones que desee.

Con ello, se fomenta la buena gestión del tiempo del trabajador. Además, según la filosofía de la empresa, SteelHouse respeta al trabajador. Ello contribuye a que el trabajador tenga a la empresa en alta estima.

Beneficios del fin de semana más largo

Según un estudio publicado por la revista Stress and Health, la semana laboral más corta mejoraría el bienestar del trabajador. Además, al reducir la sobrecarga laboral se previene el Karoshi y el estrés causado por jornadas laborales más largas.

Un fin de semana más largo beneficiaría también a los niños y adolescentes. Además, una semana escolar más corta reduciría el ausentismo. Para lograr beneficiar a los niños, estas medidas tendrían que complementarse con jornadas escolares un poco más extensas.

Además, un fin de semana más largo contribuiría a la conciliación real. Tanto trabajadores como estudiantes lograrían desconectarse y estarían más motivados al incorporarse a sus actividades usuales.

Para gestionar bien una semana laboral más corta, sería ideal incorporar un gestor de horario y proyectos. Así, los trabajadores podrían señalar a qué dedican sus horarios laborales. Además, tendrían la libertad para gestionar su tiempo, lo que aumentaría la motivación y productividad del trabajador.