Si echamos la vista atrás unas décadas, este problema que hoy nos planteamos era un término inexistente. Los hombres eran quienes salían a trabajar a diario para así poder hacerse cargo del mantenimiento de la familia, mientras que las mujeres permanecían en sus hogares, ocupándose de los niños y las tareas del hogar.
Tras la entrada de la mujer en el mercado laboral, esto cambia, y nos encontramos ante varios dilemas. Pero como siempre, debemos de sobreponer los beneficios:
- Mayor rendimiento en el trabajo. La adaptabilidad de los horarios genera una mayor motivación, que el trabajo no suponga una carga que limite el resto de tareas de la vida diaria (familia, ocio…) Los empresarios aún se frenan ante la flexibilidad de horarios, pero la realidad es que no por estar más horas en el trabajo se rinde más, de hecho en la mayoría de países europeos no se trabajan tantas horas como en España.
- Cuantas menos horas se pasen en la oficina, más ahorro energético. Como hemos dicho en el punto anterior, posiblemente pasemos más horas en la oficina de las que estamos trabajando. Si el rendimiento fuera al 100% del tiempo, no tendríamos tantas horas de más encendidos los equipos de trabajo, la iluminación, aire acondicionado…
- Si una empresa es capaz de cuidar a sus empleados (en este caso facilitándoles la vida con la flexibilidad de horarios), está demostrado que también cuidan más a los clientes. Y, ¿qué genera mayores beneficios que un cliente satisfecho?
- Las posibilidades de hallar al candidato perfecto para cada puesto de trabajo son superiores, ya que al no contar con el obstáculo de la existencia de un horario fijado por la empresa al que se deba adaptar el trabajador, es éste quien puede decidir como hacerlo.
- Se reduce el absentismo laboral, ya que al ser ellos mismos quienes se regulan los horarios, pueden atender a sus obligaciones personales sin necesidad de faltar al trabajo, tener que cambiar turnos o demandar días libres.
Desde Sesame consideramos que nuestra herramienta facilita los aspectos de la conciliación laboral, ya que es la misma la que contabiliza las horas de trabajo de cada persona, puesto que sería complicado realizarlo de forma tradicional.
