Los continuos cambios a los que se enfrentan a día de hoy las organizaciones (tecnológicos, demanda de productos y servicios, sociales…) , están provocando cada vez más que los puestos de trabajo de sus empleados ya no sean estáticos (deben ir cambiando de funciones según se requiera) y que sea necesario en las empresas una continua adaptación en los planes de formación de sus trabajadores que garantice el no quedarse atrás.
Con este objetivo, mediante los programas de capacitación profesional, las empresas proporcionan las acciones formativas necesarias para actualizar los conocimientos y habilidades de sus trabajadores e impedir que se queden obsoletos.
Importancia del plan de capacitación de personal
La implantación de los planes de capacitación laboral redunda en múltiples beneficios fundamentales para propiciar un crecimiento competitivo fuerte en las organizaciones:
- Los márgenes de beneficios son mayores en las empresas que los implantan (alrededor de un 25% más).
- La productividad media por empleado crece sustancialmente (más del 30%) y por lo tanto también los ingresos que genera cada uno de ellos (alrededor del 20%).
- Influye muy positivamente en la retención del talento, ya que la falta de formación adecuada es una de las principales causas por las que los trabajadores dejan las organizaciones.
- Son un importante factor de motivación para las personas, que se sienten más realizadas, ya que ven en estas acciones un impulso para el desarrollo de su carrera y que la empresa apuesta por su empleabilidad a largo plazo.
- Suponen una medida de apoyo para interiorizar mejor la cultura organizacional y crear mejores ambientes laborales.
En definitiva, la inversión en capacitación de personal es totalmente necesaria para poder contar con un fuerte equipo de profesionales, ayudarles en su desarrollo profesional y personal y proporcionales las herramientas necesarias para poder hacer un buen trabajo. Este será nuestro pilar para adaptarnos más fácilmente a los nuevas necesidades de los mercados.