Los miedos son necesarios en ciertas ocasiones. Nuestros cerebros generan una respuesta de miedo hacia ciertos estímulos por los que corremos peligro en una situación concreta. No obstante, existen miedos y creencias limitantes que nos paralizan en situaciones innecesarias como el trabajo.
En general, experimentamos miedos y creencias que no nos permiten evolucionar. Estos miedos no son más que creencias que hemos repetido, consciente o inconscientemente, hasta convertirlos en verdad. Los miedos y creencias limitantes afectan nuestra autoestima, nuestra vida social y profesional. Los miedos en el área laboral pueden mermar nuestra productividad y evolución.
Algunos miedos comunes son el miedo al rechazo, al fracaso, a la pérdida de poder y al cambio. Algunas de las creencias limitantes más comunes son «yo no puedo hacer…», «no soy bueno para…», «es imposible que me pase…». Es importante cambiar estas creencias y miedos para poder lograr nuestras metas.
Cambiar las creencias limitantes en el trabajo
Para cambiar las creencias limitates, se debe seguir un proceso consciente. Aunque no es sencillo cambiar creencias que están instauradas en nuestros cerebros, es posible hacerlo.
- Identifícalas y obsérvalas. Cuando pilles alguna crrencia limitante, anótala en un papel o date cuenta de que existe.
- Busca la raíz de la creencia. ¿Cómo surgió? ¿había alguien que te lo repitiera?
- Cuestónalas. Duda de la creencia, rétalas y date cuenta de los errores en esa creencia.
- Cámbialas conscientemente y reemplázalas. Piensa en una creencia positiva que reemplace a la negativa y cada vez que pienses en la creencia limitante, sustitúyela por la creencia positiva.
- Pon límites en tu entorno. Si quieres dejar de hacer algo y todos a tu alrededor lo hacen, busca personas con tus nuevos intereses y sal también con ellos. No se trata de eliminar de tu vida a tus seres queridos, sino de crear un poco de espacio para poder llevar a cado el nuevo comportamiento.
- Lleva las nuevas creencias a la práctica. Este proceso no será sencillo, ya que cuando nuestro cerebro piensa que algo es verdad, es difícil cambiar su sistema de ‘verdades’. Tomará su tiempo, pero cada vez que utilices tu sistema de creencias limitantes, sustitúyelas por las nuevas creencias.
Pon en práctica las afirmaciones. Las afirmaciones son frases positivas que nos repetimos hasta que nuestro cerebro las procesa como verdad.
¿Por qué cambiar tus creencias?
Es clave cambiar las creencias limitantes por creencias positivas y superar nuestros miedos para permitirnos evolucionar en todas las áreas de nuestras vidas, especialmente en el ámbito laboral. El desempeño en nuestra labor se vincula a menudo con nuestra autoestima y hacer un cambio positivo en una, nos beneficiará en la otra.