En nuestro país queda mucho camino por hacer en cuanto a flexibilidad horaria, ya que en la actualidad más del 88% de las empresas se encargan de definir la gestión de tiempo que realizan sus empleados.
Causa de las ataduras propias de los horarios y la poca disponibilidad para otras ocupaciones o para complementar con un horario infantil, es la baja tasa de natalidad que sufrimos actualmente, incrementándose el número de abortos y divorcios, que nos está convirtiendo en parte del «Continente sin hijos».
En datos:
- El 60% de las familias no hacen uso de las guarderías, por sus precios elevados (solo tienen plaza en guarderías públicas o becas en privadas los hijos de familias monoparentales o numerosas con madres trabajadoras)
- Tras el nacimiento del bebé, la madre tiene derecho a 16 semanas de permiso (la media en la UE es de 27.7 semanas)
- El padre solo tiene derecho a 15 días
- Permiso de lactancia: 1 hora de ausencia del trabajo (o dos medias horas), se puede disfrutar hasta que el/la menor cumpla 9 meses
- Propuesta de reducción de jornada
- Posibilidad de excedencia por cuidado de hijos menores de 3 años (no retribuido)
- Baja o permisos como prevención en caso de posibilidad de riesgo para la madre o el bebé
- 3 de 4 personas con empleos a jornada parcial son mujeres
- Lucha por conseguir un trabajo con flexibilidad horaria que permita dejar y recoger a los hijos del colegio
Como consecuencia de todo ello, y de la poca estabilidad laboral que sufrimos en la actualidad, está subiendo la edad de las mujeres en ser madres, ya que existe un gran temor al despido en caso de embarazo. La más afectada, la conciliación.